Ese campeonato es muy recordado por el buen juego del equipo, resultando la delantera más goleadora y la segunda defensa menos vencida. El Rojo, entrenado por Américo Gallego, tenía un plantel integrado entre otras figuras por Gabriel Milito, Federico Insúa, Daniel Montenegro y Andrés Silvera, siendo este último el goleador del campeonato con 16 goles. Andrés Silvera fue el goleador del torneo, metiendo muchos goles claves para los Diablos Rojos.