Normalmente, las camisetas de portero son las que suelen llevarse la palma en ser los uniformes más antiestéticos del fútbol, pero, en ocasiones, los diseñadores y las marcas se pasan de creativos y producen equipaciones que horrorizan a los aficionados. Pero, a menudo, las camisetas de los equipos no están a la altura del propio deporte y no son tan bonitas como una jugada de Pelé. Esto preocupó a su seleccionador, Carlos Bilardo, quien solicitó a su equipo la obtención de una segunda equipación azúl Air-Tech para afrontar los cuartos contra Inglaterra sin preocupaciones extra.